Entrevista con el Maestro Internacional y entrenador Óscar Sánchez
En esta primera entrada de la entrevista realizada al MI Óscar Sánchez nos enfocamos en las preguntas que abundan en la trayectoria del maestro, desde sus primeros pasos hasta llegar a convertirse en Maestro Internacional, donde el lector encontrará interesantes apreciaciones de cómo es el camino arduo, y no sin altibajos, en la búsqueda de un ajedrez de calidad.
Como entrevistadores fungieron los profesores de la Escuela de Ajedrez en Línea, el profesor Alfredo Cano quien imparte clases para niveles intermedios y avanzados, así como el profesor Conrado Muñoz.
Nos acompañó el Maestro Internacional (MI) y entrenador FIDE Oscar Sánchez quien es entrenador en el estado de Yucatán y asistió como entrenador del equipo olímpico femenil a la Olimpiada Mundial de Ajedrez 2022, que se llevó a cabo en Chennai, India.
Alfredo: Admiro personalmente mucho a los las a los jugadores de ajedrez que se esmeran en conseguir su título porque no es cualquier cosa. Igual es un mensaje para los estudiantes de escuela de ajedrez en línea. Si ustedes desean profesionalizarse en ajedrez, es muy importante esmerarse. Empeñarse en buscar títulos reconocidos por la Federación Internacional de Ajedrez, porque definitivamente no son regalados. Vamos, realmente se necesita mucho empeño y mucha dedicación y necesita de una disciplina que no cualquiera lo reúne. Así que los invito a todos los jugadores que nos acompañan en el día de hoy, estudiantes o no estudiantes de escuela de ajedrez en línea, a buscar las normas, a buscar los títulos de la Federación Internacional de Ajedrez.
Conrado: Cuando todos comenzamos, lo hacemos a través de alguien. Alguno le pico la curiosidad al observar a alguien jugando al ajedrez y luego, poco a poco, empezamos a practicarlo, crece nuestra fascinación por esta disciplina y, aunque lo dejemos de practicar, volvemos a reencontrarnos con el ajedrez. Antes de centrarnos en tu carrera actual, maestro Óscar Sánchez, háblenos un poco de cómo empezó todo. ¿Cuáles fueron sus primeros pasos en este mundo?
MI Óscar Sánchez: En mi familia, el que comenzó con la pasión por el ajedrez fue mi abuelo materno, que ya falleció hace algunos años. Lo que vagamente recuerdo, no sé si habré tenido como unos siete años quizás, la verdad no estoy muy seguro, y bueno, lo conocí allí. Él era un jugador que casi no jugaba torneos, era más empírico, pero tenía uno que otro libro. Entonces de repente le gustaba como que estar viendo partidas, de una manera informal, nada muy estructurado y un día le pregunté que era ese juego, me explicó que era ajedrez y todo, amablemente. Nos solíamos dormir tarde. Recuerdo que habrá sido por ahí de las ocho de la noche y nos quedamos hasta tarde, creo que habremos estado ahí como unas dos o tres horas. En fin, me enseñó todo, me enseñó a dar mate de dama de torre y ya no recuerdo si hasta habremos jugado una partida que seguramente me habrá ganado muy fácil, esos son mis recuerdos del primer día de mi contacto con el ajedrez.
Conrado: Muchos de los alumnos empezaron de esa manera, ya sea que papá, el abuelo, o un conocido les inculca esa curiosidad y poco a poco, llega un momento en que no se puede dejar de practicar el ajedrez.
MI Óscar Sánchez: Si, estoy de acuerdo, estoy de acuerdo. El ajedrez, es un poco adictivo y creo yo, porque permite la creación intelectual desde el principiante hasta el maestro. Entonces eso para mí siempre es algo muy adictivo.
Alfredo: Claro. Justo como lo decía Conrado, y también es bien interesante. También los grandes jugadores empiezan desde el ámbito familiar a relacionarse con el ajedrez, es como un ámbito también de convivencia. ¡Qué bueno que estamos en este camino todos! Tú has logrado a lo largo de este trayecto, desde que empezaste con tu familia, pues diferentes logros. A nosotros nos gustaría conocer, y también me imagino que a los estudiantes, saber en qué momento se decide uno a entrenar, cuando ya se sabe jugar lo básico, es decir, puedo mover las piezas, conozco los movimientos del enroque, un peón promueve, sé que hay que controlar el centro, etcétera. Pero hay un momento clave en el que uno dice “quiero ir más arriba, más adelante” por lo que hay que entrenar y dedicarle horas de preparación al ajedrez. ¿En qué momento tú decides esto? ¿Qué está pasando en tu vida en ese momento que tú dices “yo quiero dedicarme al entrenamiento del ajedrez”? ¿Y cómo cuántas horas aproximadamente empiezas a entrenar?
MI Óscar Sánchez: Ok, a ver, voy a tratar de responder, es una pregunta interesante. Lo primero, yo siempre digo que es lo más importante, es que te guste mucho, más allá del de querer lograr un resultado o ser campeón de tu estado, a nivel nacional o querer lograr algún título. Como el ajedrez es un camino largo, es un proceso a veces difícil, donde se combinan buenos momentos con unos no tan buenos, creo que tiene que haber una motivación intrínseca, en este caso, de un gusto por el juego. En mi caso, cuando me enseñaron a jugar ajedrez no me atrapó tanto. Estaba más tentado a salir y jugar fútbol y salir con mis amigos, pero realmente no sé qué habrá pasado de verdad. A veces trato de hacer memoria y no sé si quizás a través de los libros que tenía mi abuelo, que por ahí había un libro de Capablanca, había un libro de Alekhine, había un libro de celadas, otro de apertura. De repente, leyendo estos libros, no sé si le agarré bastante amor al juego y yo diría que más o menos cuando tenía 11 años, ya si prefería a veces hasta quedarme estudiando o digamos analizando partidas de manera muy informal, claro está que no tenía ningún plan ni mucho menos, que a veces hasta salir a jugar. Y bueno, diría que más que entrenar estudiaba mucho ajedrez y también jugaba mucho.
José Raúl Capablanca vs Alexander Alekhine en el torneo de San Petersburgo 1914
Creo que el entorno es muy importante para el jugador de ajedrez. En aquel entonces, en la Ciudad de México tenía posibilidad de ir a Club México y también había, la verdad había una buena cantidad de torneos en la ciudad y creo que algo que motiva a un chico es justamente jugar, y creo que es como el pilar del entrenamiento, sobre todo en esas edades, la práctica. Diría que ya lo que se llamaría entrenamiento como tal inició cuando empecé a hacer cosas que no me gustaban, porque creo que muchas veces el verdadero entrenamiento empieza como fuera de tu zona de confort. Cuando por decir, por poner un ejemplo, de chico yo jugaba mal los finales y además no me gustaban. O sea, no me gustaba estudiarlos, no me gustaba jugarlos. A veces prefería sacrificar dos peones con tal de no cambiar damas.
Alfredo: ¡clásica!
MI Óscar Sánchez: jajaja, cosas de ese tipo. Creo que ya debió haber sido más o menos como a los 14 años, que ya empecé a hacer cosas ya con un objetivo de ser mejor jugador y no tanto por el simple gusto de lo que yo quería hacer y ver.
…pienso que en un momento dado lo que me hizo subir un escalón muy importante de nivel fue justamente estudiar los finales y jugarlos, y bueno al final es por eso que les termine agarrando mucho gusto. Ahora es una etapa de la partida que me gusta mucho estudiar y jugar, es curioso cómo cambian las cosas.
"El ajedrez es un poco adictivo... porque permite la creación intelectual desde el principiante hasta al maestro."
Alfredo: Claro, mencionas algo bien interesante. Porque justo también es algo que experimentamos, al menos con los conocidos que yo tengo, es que los finales empezaron por disgustarnos un poco, que los veíamos muy lentos, menos dinámicos que el medio juego, le dábamos un poco de mayor relevancia a estudiar la táctica, los temas tácticos. Pero los finales de repente los olvidábamos, los negábamos; que interesante sería como un punto importante a reafirmar, al menos en México y en Latinoamérica, pues los finales, el estudio los finales, la recuperación del estudio de los finales, que no es que no exista, es que de repente nos aburren a veces, a los estudiantes de jóvenes.
MI Óscar Sánchez: Y fíjate, es curioso que ahí quizás está una labor interesante del entrenador, por ejemplo, si a un chico se le hicieran tediosos los finales, yo creo que un buen recurso, por ejemplo, es agarrar estudios artísticos no muy difíciles. Los estudios artísticos pues tienen mucha magia y son digamos, posiciones finales, por decirlo de alguna manera. Y la otra cuestión, hace algunos años me topé con un libro que el autor es alguien llamado Van Perlo que se llama Endgame Tactics, entonces son como 1300 posiciones y todas son tácticas en el final. Entonces quizás, a veces, es más bien cómo se presenta, qué material se presenta y cómo se presenta. Porque como que tenemos esta idea de que en los finales es esto como en cámara lenta, que es tedioso, que hay que ir mejorando la posición poco a poco, que no hay golpes tácticos, pero creo que en los finales hay muchas más cosas que eso, pero pues a veces no las descubrimos o no las conocemos.
Libro de finales tácticos escrito por Van Perlo
Alfredo: Claro, tienes mucha razón. ¡Qué buenas observaciones, maestro!
Conrado: Bien, entonces fue a partir de los 14 años que te enfocaste en mejorar la calidad de tu juego, me imagino que entonces empezaste a obtener resultados. Luego, te encaminaste a conseguir el título de maestro. Sabemos que en el ajedrez se requiere seguir un proceso, empiezas con el título de Maestro Nacional, a menos que lo hayan quitado, anteriormente, me acuerdo, todavía estaba. Luego, viene el título de maestro FIDE, el cual obtienes al conseguir cierto rating en un torneo. Por último, las normas para conseguir el título de maestro internacional, tienes que hacer tres normas, es decir, hacer cierta cantidad de puntos entre tres diferentes torneos que deben reunir ciertos requisitos y tener un rating FIDE como límite para conseguir ese título. Tú eres maestro en internacional. ¿Cómo fue ese trayecto para ti?
MI Óscar Sánchez: Ok, pues bueno, yo creo que un punto de inflexión importante es a los 12 años, me encontraba como decía Capablanca (3er Campeón Mundial de Ajedrez de origen Cubano) con la fiebre del ajedrez. Quizás no entrenaba como tal, o sea, digo, para mí la diferencia principal, entre el entrenamiento y el estudio, es que el entrenamiento es una práctica deliberada, con ciertos objetivos muy específicos, y estudiar, pues puede ser agarrar un libro, no sé, cualquier cosa. Algo que me ayudaba es que prácticamente todo lo que llegaba a mis manos lo estudiaba, o sea, llámese revistas, en aquel tiempo me llegaban revistas viejas de ocho por ocho, de revistas Jaque; todo este tipo de revistas tienen comentarios muy interesantes de los grandes maestros y pues claro que se aprenden cosas muy buenas. Creo que también tuve contacto con buenos los libros, que obviamente las generaciones de ahora han cambiado un poco en esa parte, pero para mí sigue siendo muy importante el contacto con buenos libros de ajedrez. Algo que va a venir a cambiar radicalmente mi manera de estudio es que me parece que a los 14 años tuve la fortuna de que me compraron una computadora de escritorio, se supone que más que nada la función era para que ayudara con la escuela, pero bueno, realmente lo que más me ayudó fue en el ajedrez, ya que instalé el ChessBase, tuve mi primera base de datos y me parecía algo increíble que pudiera buscar cualquier posición que me interesara y ver partidas. Entonces el hecho de que puedas tener esa cantidad de información de una manera más sencilla me ayudó un montón.
ChessBase una herramienta imprescindible en el progreso del ajedrecista
En cuanto a los títulos, recuerdo que en el año 2002 se hizo un nacional absoluto en Ciudad de México, en un hotel del Centro Histórico, el Hotel Bamer, que creo que ya no funciona porque tenía un problema de arquitectura que se iba inclinando y creo que al final lo terminaron cerrando. En ese torneo, que era un nacional absoluto, pedían hacer la mitad de los puntos para el título de Maestro Nacional. Entonces, bueno no creo que yo tuviera la fuerza de maestro nacional en ese momento, pero cumplí con el requerimiento de puntos en el 2002. Tenía unos 13 años y entonces ahí fue, mi primer título oficial. Después descubrí que muchos años antes era mucho más difícil obtener el título de Maestro Nacional porque pedían 2200 de rating. De hecho creo que varios hicimos el título de maestro nacional en ese torneo.
"...algo que motiva a un chico es justamente jugar ...es como el pilar del entrenamiento, sobre todo en esas edades, la práctica."
Después el título de Maestro FIDE me parece que, más que lo lograra por un torneo directo, lo obtuve por cruzar la barrera de los 2300. No sé si habrá sido por ahí que tenía 18 años o 17, no lo sé, por ahí ha de haber sido realmente, no recuerdo exactamente. El título MI (maestro internacional) hay formas de obtenerlo directamente, pero en mi caso fue necesario hacer las normas de maestro internacional y llegar al rating de 2400. No sé si esto sea bueno o malo o simplemente se dio así, me hice maestro internacional sin un objetivo claro de lograr el título, es decir, como que simplemente este se dio. Por ejemplo, esta es mi visión, de niño y de adolescente soñaba con ser gran maestro y todo, pero más que por el hecho de tener el título, por lo que significaría estar viajando, jugar con jugadores muy fuertes de un montón de países, tener la oportunidad de jugar un ajedrez de mucha calidad. O sea, eso siempre como que para mí era una motivación muy grande, más que “Hay soy gran maestro” o cosas así. Realmente no me interesó por ese lado, pero sí me empecé a dar cuenta que en muchos momentos para que te dieran condiciones en los torneos, por ejemplo, era muy importante el título. Hubo un tiempo en que tenía muy buen rating y se me consideraba un buen jugador, pero al no ser M.I. y haber MIs a lo mejor de menos rating, pues ellos sí tenían condiciones por el hecho de ser MI. Entonces, por ese lado dije: “creo que el título sí es importante”, en esta cuestión para las condiciones en los torneos.
Conrado: ¿Se abren más oportunidades?
MI Óscar Sánchez: Claro, te abre más oportunidades. Exactamente. Para conseguir el título de MI, hice mi primera norma, me parece que en el 2007 en un Open en Ciudad de México, luego hice otras dos normas en un absoluto y creo que en un abierto. Por cosas que hubo con la Federación, mi título tardó en salir como dos años, debió haber salido en el 2012 que tuve la fortuna de que en un viaje a Cuba, aún no sé cómo pasó. Tenía como 2350 de rating, subí 50 puntos, entonces, al haber cruzado la barrera de los 2400 y ya teniendo las tres normas mi título tenía que salir. Es curioso, el hecho de que no me dieran el título como lo sentí una injusticia, o sea que no sé qué pasó, si alguien no hizo el trámite, como que me motivó a seguir jugando bien. Entonces en ese lapso, hasta que me lo dieron, hice otras tres normas de MI. Entonces a veces, a veces pasa este fenómeno que me he dado cuenta que la gente cuando juega más duro es justo antes de lograr el título porque a veces cuando ya logras el título como que sientes que ya lograste algo que es muy importante y te relajas. Te relajas y tienes que encontrar una nueva motivación. Entonces, al final creo que de cierta manera agradezco que no me hayan dado el título porque me hizo como esforzarme más, y al final pues me lo dieron en el año 2014.
Un joven Óscar (MF) ganó el panamericano universitario, celebrado en Venezuela 2012
Conrado: Desde 2014 es maestro internacional. Llegó el pico de la dopamina y descendió. Y a seguir estableciendo nuevos objetivos.
MI Óscar Sánchez: Así es y bueno la verdad, a pesar de que mi motivación no era en sí el título, el título sí te da muchas facilidades, esa es la realidad.
Conrado: Descuentos en inscripciones, hospedaje.
MI Óscar Sánchez: sobre todo la de las condiciones. Sé que no es la pregunta, pero me gustaría hablar de eso. Quizás toquemos el tema más adelante, de que obviamente también cuando obtienes un título mucha gente te busca como entrenador o para que les des clases. Y eso está padre, pero creo que si falta una educación en general de que no necesariamente un buen jugador es un buen entrenador. Y también esa creencia de que para que un entrenador me pueda ayudar tiene que jugar mucho más fuerte que yo o ese tipo de cosas. Por ejemplo, a lo mejor mucha gente no conoce, pero hay un entrenador en lo que fue la zona de Ucrania en los años 60 que se llama Víctor Kart, y él tendría más o menos un nivel, a lo que ahorita dirían que entre 2000-2250. ¿Y a qué me refiero? Él entrenó a grandes maestros como Dorffman, como Mikhailchisin y siendo un jugador que dirías no puede entrenar a gente que se va a hacer gran maestro. Entonces yo creo que es muy importante que cuando se busca un entrenador, sobre todo para los padres, como que a veces sólo se fijan en esta parte del nivel, cuando hay que fijarse también en las cualidades personales: en cuánta experiencia tiene como entrenador, qué tanta pedagogía. Incluso muchas veces decían “oye, a tal jugador vamos a llamarlo para que entrene”, y dije “no, más bien hay que descubrir quién lo entrenó a él”.
Victor Emanuelovich Kart, entrenador de grandes maestros como Beliavsky, Mikhailchisin, Romanishin
Conrado: Así es, averiguar quién fue el que lo acompañó en ese camino.
MI Óscar Sánchez: Exactamente. Entonces, sólo quería mencionarlo porque me parece que es un tema importante.
Alfredo: Sí, es interesante. La verdad es que sí, lo mismo comentaba en alguna otra entrevista otro invitado que precisamente no todo buen jugador es buen entrenador y eso es muy importante destacarlo. Y muchos de los muy buenos entrenadores no son muy buenos jugadores. Y bueno, también sucede que como tú son muy buenos jugadores y muy buenos entrenadores también. Pero bueno, ahorita estabas comentando precisamente que cuando te llegó la computadora en la época donde estas de estudiante, muchos de nuestros estudiantes de Escuela de Ajedrez en Línea pues tienen que sortear los horarios, las actividades entre la escuela, entre que si van al entrenamiento de taekwondo, fútbol, baloncesto y a lo mejor unas artes y luego el ajedrez. Entonces tienen que organizarse.
Nos gustaría saber en tu experiencia cómo fue esto, cómo es esta organización del tiempo, cómo fue para ti, si fue realmente algo que dijiste “fácilmente de tal horario a tal horario de ajedrez”, o realmente fue algo complejo que a lo mejor sigue y tendrá que seguir siendo complejo, pero que justo atendiendo a las pasiones y a lo que uno desea conseguir tiene que ir sorteando y organizándose. Bueno, ojalá nos puedas ayudar con eso también para los estudiantes que están organizando también sus tiempos muy a menudo, entre tomar las clases y hacer otras actividades.
MI Óscar Sánchez: Ok, bueno, aquí pues voy a dar mi respuesta lo más sincera posible. Bueno, lo primero es que no considero que yo sea un buen ejemplo en ese aspecto. La escuela, sobre todo a mí, sobre todo hablando la secundaria y la prepa, había obviamente materias que me gustaban, pero no recuerdo algo, algún aprendizaje que significara mucho para mí. Creo que sobre todo en lo que me ayudó fue en la convivencia de las personas, o sea, de convivir con distintas personas, es decir, digamos eso creo que es muy importante. La verdad nunca me he caracterizado por ser un buen estudiante, porque a veces funciono mucho con que lo que me apasiona me llama mucho la atención, le echo muchas ganas, pero de repente lo que no me llama, en aquel entonces sobre todo pues lo dejaba de hacer, lo cual obviamente este no está bien. En ese tiempo no tenía tanto problema porque en mi familia, en este caso, vivía con mis abuelos maternos que fueron como mis papás, realmente ellos, más que nada me preguntaban si me interesaba alguna, digamos actividad y realmente lo que recuerdo es que me metieron sólo en algunas clases de inglés, pero era algo que realmente no ocupaba mucho tiempo. Estoy hablando de la época, por ejemplo de la secundaria, cuando llegó mi computadora, realmente la secundaria obviamente no es tan demandante como lo sería la prepa y luego obviamente la universidad.
"...la diferencia principal, entre el entrenamiento y el estudio, es que el entrenamiento es una práctica deliberada, con ciertos objetivos muy específicos"
En aquellos tiempos si tenía mucho, mucho tiempo y regularmente pues mi rutina era, yo vivía en una unidad habitacional en Tlatelolco, a lo mejor algunos la conocen en Ciudad de México, entonces era muy normal para mí salir, hacer deporte, ir a jugar basquetbol o futbol con mis amigos, hacía las tareas que representaban muy poco tiempo y sí diría que cuando tuve 14-15 años sobre todo le dediqué mucho tiempo al ajedrez. Yo creo que entre mis 14 y mis 17 años fue cuando he entrenado más ajedrez en toda en toda mi vida. Estuve en algunas universidades, estuve en la en la UNAM, estuve en la UAM, en la carrera de Sociología. No terminé la carrera justamente porque decidí escoger el ajedrez pero a veces siento que no fue una elección, a ver cómo lo digo, como que simplemente fueron muchas cosas. Tenía mucho la idea de que hacía una o hacía otra. ¿No sé por qué me metí mucho a esa idea? Actualmente creo que, obviamente dependerá de cada situación, cada situación es diferente, cada persona, que se pueden hacer las dos cosas, pero creo que algo muy importante es que las personas encuentren, además de que les apasione el ajedrez, que les apasione algo académicamente. Y tan es así que sí se puede que yo conozco varios ejemplos de jugadores que son buenos y que también pudieron hacer, digamos su vida académica. Obviamente esto requiere sacrificios, esa es la parte dura. Que a veces no vayas a la fiesta o no vayas a un viaje. Es este caso de atleta- estudiante o por decirlo de alguna manera. Pero les digo, yo no soy el mejor ejemplo en eso, pero si hoy en día ya como adulto responsable, supuestamente, la verdad para los chicos que me están viendo si les gusta mucho el ajedrez y a lo mejor hasta ya tienen en mente que quieren ser grandes maestros, pues no olviden que es muy importante como personas tener un desarrollo integral. Eso sí, quizás esto lo voy a decir porque opino yo, no porque diga que está bien, pero si estudian algo pues que les guste. No sólo por obtener un papel, si encuentran algo que les guste pues va a ser mucho más gratificante, porque también estudiar una carrera es un proceso largo.
Unidad habitacional en Tlatelolco, su nombre significa "sobre el montículo de arena", el lugar que vio nacer el sueño de un joven por ser maestro de ajedrez
Conrado: Si requiere constancia, disciplina y si tiene pasión, le añadimos pasión, mucho mejor.
MI Óscar Sánchez: Si, lástima que esas palabras de constancia y disciplina no estaban en mi diccionario en aquel entonces.
Conrado: Sí, claro, claro que estaban, solamente que en el ajedrez.
MI Óscar Sánchez: Sólo en el ajedrez. Si, ese era el problema clave, jajaja.